2020, el año de los cambios que nos conducen a la transformación. Un año que sin duda recordaremos.

Siento que estos meses no han sido más que el inicio de un proceso individual y colectivo, me atrevería a decir planetario y de larga duración, que puede ser una gran oportunidad para repensar nuestro estilo de vida y sociedad. Está en nuestras manos. Lo que tú no decidas, asumas y hagas, otro lo hará por tí. Asumamos nuestra responsabilidad y poder creador. Un cuerpo humano está compuesto por millones de pequeñas células. Cada uno de nosotros somos también una pequeña célula del planeta. Cuando una  célula de un cuerpo enfermo sana, contribuye a que todo el cuerpo comience a sanar.

¿Qué puedes rescatar de todo lo vivido en este 2020?

Imagina que ya ha pasado un tiempo, que has conseguido reciclar el peso emocional acumulado, los pensamientos negativos de miedo e incertidumbre, las reacciones automáticas limitantes que actualmente se han convertido en comportamientos cotidianos medio normales, y toda la saturación de sobreinformación tóxica monotemática que hemos recibido durante meses.

Imagina que ya ha pasado un tiempo, que has cultivado la paz-ciencia, que te has atrevido a confiar en ti y en la vida, que has aprendido a aceptar tu realidad día a día, tal y como es, no sólo como te gustaría que fuera, que te has reconciliado con tu historia personal, que has aprendido a escuchar a tu corazón por encima de cualquier mandato mayor, que te atreves a reconocer tu propia mierda emocional, mental, de actitudes…te haces cargo y las reciclas , que también ves, reconoces y muestras tus potenciales, tus talentos, …que le dices sí a la vida, venga como venga, y que en vez de gastar tu energía en quejas y lamentaciones, la empleas en atreverte a vivir.

Sólo por unos instantes imagina que vuelves a mirar la vida como lo haría una niña ante este mundo que le resulta totalmente nuevo, sin prejuicios, sin ideas preconcebidas, con la humildad y la apertura de mente del que desconoce y quiere aprender, con toda la curiosidad y las ganas de comprender, conocer, hacer, con el corazón abierto, dispuesta a amar, a vivir, a jugar, a compartir, a crear.

Ahora respira y observa la respuesta de tu cuerpo cuando te imaginas así. Recuperas cierto tono vital, ¿verdad? Algo en ti se activa. Incluso puede que se te haya escapado una sonrisa o un suspiro.

Si no notas nada, vuelve a leer los dos párrafos anteriores con más calma y visualiza el mensaje  en tu pantalla mental con todos los detalles sensoriales que puedas: cómo serían los colores, olores, la luz, la temperatura, tus gestos, posturas, movimientos, la respiración, la mirada… reactivada la inocencia y curiosidad de la niña o el niño que un día fuiste, con la sabiduría de la persona adulta y responsable que eres hoy.

“Cada pensamiento que elijo es como una gota de agua. Cuando mis pensamientos son positivos, puedo flotar sobre el océano de la vida”. Louise L.Hay

A través de mi trabajo, tanto en las sesiones individuales, presenciales u online, como en los procesos grupales de los talleres ENFOCA, te acompaño en esta transformación interna. No esperes a las señales agudas de ansiedad, angustia o depresión para mirar hacia dentro, limpiarte, transformar lo acumulado y rescatar tu fuerza interior para caminar hacia delante con confianza.

Y si ya has tocado fondo, o conoces a alguien que lo haya hecho, es humano. El alma está recorriendo la noche oscura. Es tu viaje, nadie lo puede hacer por ti. Pero si quieres, también te puedo acompañar, con presencia, con amor, con conocimiento y herramientas adquiridas durante más de 20 años de experiencia profesional y vivencias personales, para que puedas ir emergiendo a la luz de tu conciencia, transformada.

Puedes contactarme por teléfono o whatsapp en el +34 645005805 o escribiéndome a infoirmamier@gmail.com. Te atenderé encantada.

Te deseo paz y amor para este fin de año y una mirada creativa y curiosa para el 2021, con el discernimiento y la fuerza interior necesarias para atreverte a ser quien realmente eres y construir la vida que deseas.